miércoles, julio 20, 2011

Del enamoramiento y sus engaños

Hola, soy un monstruito. 
No me gusta enamorarme.
¡Ay, pero si es la parte más linda!

No van a lograr convencerme, ¡adictos!
Pues qué triste que piensen así. Si lo más lindo es el gran engaño hormonal que sufrimos los primeros tres meses, qué terribles serán sus vidas de pareja.
Yo, después de tantas decepciones. Después de descubrir que no existe el ser perfecto. Y después de estudiar que tenemos una cosita llamada oxitocita y otra llamada vasopresina, que gustan de andar llenándonos la panza de mariposas, opté por no enamorarme más.
Onda, las mariposas son -gusanos- con alas. Es un asco.
Ahora, realmente, por qué no usamos ese valioso tiempo para conocer al otro y ver si realmente merece nuestro amor. Porque la mayoría de nosotros gustamos de estar drogados, evidentemente.
Mala noticia: como les contaba, el efecto de la droga dura tres meses. Si después de esos tres meses, notás que tu compañerito o compañerita es un loco, un asesino, un volador, un suicida, etc etc etc, (o en el mejor de los casos no es un ser perfecto ni es el príncipe azul...o si resulta que tu princesa se tira unos pedos nauseabundos), perdiste el tiempo.
Y es odioso perder el tiempo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario